domingo, 11 de mayo de 2025

Por casa

Niños acostados. Todo recogido... No es mala hora aunque luego me iba a costar dormir por haber salido a correr relativamente tarde. O eso o nada. No hay otra franja horaria libre. Silvia se queda por casa descansando. Ella es la lista, yo, no.

Como siempre que salgo a correr desde hace un año y medio (la edad de mi hijo mayor) "salgo a ver qué hay"... No tengo muy malas sensaciones. Me dejé los auriculares en el trabajo y llevo unos de cable. No llevo ropa de última generación ni de marcas "top". Tampoco mis piernas las aprovecharían pero disfruto. Primero porque no tengo dolores ni impedimentos y, después, porque no puedo pedir mucho más :)

Tiro hacia el cabezo de las zorras pero con varios planes de escape por si las patas o la patata no responden a mi gusto. Muchos conejos (como yo) cruzan los campos a mi paso. Asustados tal vez. Nada que temer porque son bastante más rápidos que yo. Voy enlazando cordales y resistiendo al viento con bastante buena cara. Subida-bajada-subida-bajada-subida... Así hasta el cabezo de las zorras. Rompepiernas que tomo como entrenamiento motivado por mi objetivo recientemente establecido para dentro de 4 meses, al media maratón de montaña "Hayedo de Peñarroya" (23k | +900m).


Van cayendo los km, 13k y aunque no mucho desnivel +250m ni un ritmo vertiginoso, termino contento. Primero por el desahogo que produce el deporte en general y correr en particular y segundo porque de pulmones y corazón me siento muy bien. No tanto de piernas, eso sí... Pero bueno, estamos empezando como quien dice.


Seguimos ;)

jueves, 1 de mayo de 2025

Por los bosques de Lierde

Con el buen tiempo, salen de entre las hierbas los gusanos. Y también los corredores que somos perezosos y en invierno nos da palo el frío.

Seguimos aprovechando las ventanas de oportunidad (nada de metereológicas, que también... Sino las que mis suegros me dan en apoyo a Sil para poder "escaparme" un rato) y esta vez decido tirar hacia el Lierde. El año pasado fuí la víspera de la subida a la fuente del Paco para hacer rodaje pero, claro, de rodaje y no llegué hasta el refugio. Así que esta vez, después de una microsiesta post-lentejas de mi suegra, para allá que voy.


Con la caraja todavía -son las 16.15 horas...- intento que el cuerpo arranque y el Sol no me aplatane mucho. La primera parte, la rampa de la calle de las viñas después de atravesar el pueblo y cruzar la carretera ya pica... Y no dejará de hacerlo hasta arriba ya. 


Subo por la pista con unas vistas de los montes Collarada, Collaradeta y punta Espata muy bonitas. Con menos nieve ya. Por las laderas sobre las que discurre el camino, veo alguna antigua trinchera. Los dientes de león y otras flores inundan los bordes y el Sol se intercambia con la sombra según cambia la orientación del camino al tomar las curvas.


Aunque siento que el ritmo no es muy rápido, me encuentro relativamente bien y mantengo una velocidad constante. No dejo de correr hasta llegar al alto donde se encuentra el refugio y encuentro la bifurcación de caminos; el que he venido siguiendo, el que continúa hacia las cimas vecinas y el del sendero que he dejado al final de las viñas para tomar la pista principal y que es el que ahora voy a coger para bajar. Un camino más técnico que discurre paralelo a una pista de descenso de BTT "rock &Lierde".


Al final, han sido 6km / +250m; un primer kilómetro llano, algo más de 3 mantenidos y uno y medio de bajada. Con más tiempo (iba un poco justo porque habíamos quedado después...) puede alargarse la vuelta y salir una cosa interesante... Para este verano? Seguimos ;)

Recovery nocturno en el monte Lierde (esta vez, el Bar)


domingo, 20 de abril de 2025

Vuelta al correteo

Con el Sol (bueno, eso es "un decir") siempre apetece más salir a correr. Más bien, el que alargue el día y no haga tanto frío, ¿Verdad? Siempre es fácil y neto en tiempo, sin depender de casi nada y de nadie... Así que en mi momento actual es la opción principal de hacer deporte.

El último mes he acumulado modestamente kilómetros pero, oye, algo es algo y sobre todo lo que lo estoy disfrutando. No dejo de lado los estiramientos ni el entrenamiento de fuerza de dedos pero sí miro más hacia el exterior a la espera de poder volver a salir a trepar. Llegará. Hasta entonces, no hay excusas. A correr.


A priori, al menos de momento, no tengo en el horizonte ninguna fecha marcada en el calendario u objetivo, como el año pasado... Mi único propósito es poder acompañar a Silvia en la carrera que ella elije (si lo hace) este verano.

No posteo mucho más porque tampoco da para tanto. Dejo aquí una nueva combinación de "caminitos" (Espetreras, Santiago y Juncaral) que el otro día buscando senderos no muy embarrados hice aprovechando que salía el Sol.

domingo, 23 de febrero de 2025

Seguimos triunfando, a pesar de no merecerlo

¿Por qué digo esto..? Pues porque a pesar de no estar bajando a entrenar al roco y saliendo a roca 2 veces en 2 meses, me está cubicando más que nunca. Curioso... O no. Primero voy a explicar los resultados que me llevan a decir lo que he dicho y después las causas que creo haber identificado.

De todos es sabido que "Mozo que se casa, cuerda que se pudre..." :p o eso me dijo un colega. Imagínate ya con 2 bebés de 15 y 2 meses. Pero bueno, estamos vivos que digo cada mañana. Así que el vivo al bollo. Y mi bollo es la escalada. 

Este sábado, tocaba volver a Trasobares. A mí personalmente, es una escuela que me encanta. Por la calidad de sus rutas y porque el estilo, en general, se me da bien. Pero sobre todo por la roca. Aunque no me da oportunidad de hacer muchos pegues. Lo abrasiva que es me da las mejores sensaciones de pies. Para mí, eso es importante. Sobre todo cuando no estás muy fino porque no sales mucho a roca.


Llegamos sobre las 11 y nos ponemos a lo nuestro. Tras calentar en 2 6b y 6a+ den café cortado que ya había hecho, Mon y yo, nos vamos a la nevera. Más tarde acudirán Michel y Álex. Allí el objetivo es volver a probar una vía que para el curso de vuelos con www.guioascaraoculta.com monté y probé, "Algoritmo, 7a". Sin embargo, antes, Mon prefiere hacer la de su izquierda, que también tiene muy buena pinta y las chapas cerquita. Seguimos calentando... La vía en cuestión es "Vete a porruvas, 6c+".

Es una vía técnica, de escalar y con una sección más difícil arriba, además de una llegada a la "r" divertida. A Mon se le escapa el a vista por un pelo. Pegazo... Luego la encadena fácil. Tras su a vista fallido, es mi turno y voy escalando escuchando a Mon cantándome algún paso y presa. Aunque alguna sección la hago diferente a él, su cante y las cintas puestas hacen que aunque lo tenga que pelear, consiga chapar la cadena en lo que a día de hoy ha sido mi flash más duro. Cosas del escalismo...

Aunque haya viernes tarde que esté a punto de rajarme cuando tengo la oportunidad de salir el sábado, voy. Sólo tomar el aire ya es un triunfo. Despejarme, hablar con otras personas de fuera de Bebelandia, hacer deporte... Con eso me sobra. Y creo que este es el primer factor clave en estos sorprendentes resultados que estoy consiguiendo. Escala sin expectativa de resultado alguna, sin presión. Escalo por lo que sólo se debería escalar, por disfrutar; de la roca y de la compañía, de uno mismo y la Naturaleza.


El segundo factor es que si bien no estoy pudiendo bajar al tablón, procuro hacer en casa cosicas; estiramientos, multipresa, core, salir a correr... Lo que sea que pueda hacer en mis circunstancias y con mi tiempo. Todo suma. Especialmente las suspensiones para mantener lo que pueda de fuerza de dedos y no lesionarme. Además, entreno fuerza constantemente cogiendo a mi hijo y a mi hija. Cuidado, no lo digo en broma... Nunca antes en ninguna vía había sido capaz de aguantar los pinchazos en antebrazos como ahora lo hago con ellos encima (no poderles dejar caer al suelo, obligan a saber "sufrir" y, también, a tener que plantearte tener que ir al fisio...). Ahora cuando estoy con los antebrazos petándose en una vía, sé que puedo aguantar esa fatiga y hacer algunos movimientos más. Nunca antes había tenido esa capacidad de "sufrir" y aguantar. 

Supongo que no hacer tanto deporte, el descanso y su conocida supercompensación, podrían ser un tercer factor pero si partimos de que no entreno y genero base para tal fenómeno y que descansar, descanso poco... No es tal.


Tras esta reflexión, seguimos con la jornada. Tocaba "Algoritmo, 7a" que deja montada Mon de bajada y pruebo para recordar a continuación. Me veo bien, aunque es una vía que nada tiene que ver que con su vecina. Mucho más física e intensa. Me cuelgo a mitad y, allí, de cinta a cinta mirando los pasos. Luego Mon le da un pegazo. Se nota que es su estilo, muy bien. En mi segundo pegue chapo una cinta más que antes pero me quedo en la secuencia clave de dos chapas intensísmas que, como empiezan con un paso de hombro a izquierda, me hace no forzar y ser prudente. Tampoco me queda power ni piel así que intento seguir pero termino volando un poco en la salida del crux, igual que Mon luego en otro pegue en el que creía que encadenaba, la verdad. Pero el paso de salida a un romo además de durete y que ya vas tostado es bastante dinámico y aleatorio. Hay que llegar muy fresco ahí y tirarle con todo. Para otro día ;)

Terminamos una buena jornada que seguro repetimos. Seguimos ;)

lunes, 27 de enero de 2025

No estaba muerto, estaba de crianza

... Bueno, sigo de crianza pero después de dos meses y medio, se alinearon los astros y he podido salir este domingo con Iñaki y Mon a Trasobares. El día no pintaba muy allá por la lluvia así que decidí empezarlo con actitud, es decir, con un par de huevos con bacon, fruta y café.

Quedamos donde siempre para ir en un coche y plantarnos allí para hacer el típico 6a de la chopera para calentar. Calentar... Por decir algo, porque el agua chorreaba y los dedos se me dormían del agua. Me cuelgo y termino como puedo. Nos damos una hora para ver si  mejora el tiempo. Para de llover y se levanta algo de viento que, gracias al tipo de roca y algunos tímidos rayos de Sol, nos cambian el panorama rápidamente.


Nos quedamos en el camino del cañizal. Tengo una cuenta pendiente allí, un precioso 6c, "Antinatura" que Mon para calentar monta. Le doy un pegue sin muchas expectativas ya que hace tiempo que no escalo y mi actual situación, dista mucho de ser la ideal para entrenar y menos encadenar. En un primer pegue consigo lo que en las dos jornadas anteriores de probar la vía no había conseguido, sacar el paso de salida del desplome justo antes de la placa superior.

La vía es preciosa, roca de calidad, pasos largos y atléticos en la parte inicial, más vertical que poco a poco empieza a desplomar y aunque se mantiene física, se vuelve más técnica y fina de pies en la salida del desplome para terminar con una placa vertical donde aún no está todo el pescado vendido. Una vía mantenida que sólo da tregua en el chapaje de la "r".


En el segundo pegue, con los movimientos memorizados y aunque a punto estoy de liarla por no subir bien los pies en uno de los lalrgos bloqueos del comienzo, voy con ritmo y fluyendo por la vía, me planto en el paso y termino haciéndolo con confianza para poder darme un breve respiro tras chapar antes de la última sección de placa. Cuando chapo la reunión siento lo que alguna vez en el pegue de encadenar me pasa, que no estoy cansado. He escalado bien y eficientemente. Pero sobre todo, disfrutado. Inesperadamente por el día que era, me llveo el premio que tanto se me había resistido (no suelo ensayar ni repetir vías).

Iñaki y Mon prueban un bonito 7a que yo "me salto" porque tiene un paso a bloque que no logran descifrar y le resta fluidez a la escalada que es lo que buscamos... Así que saltamos a otra vía cercana que yo ya encadené, "Traditional climbing, 6c+". La intento montar pero me falta "pitera", el paso a la sika justa antes de poder poner la 4ª cinta me tira para abajo y veo que es por fuerza así que dejo paso al siguiente. Terminamos el día dándole pegues a esta bonita vía que Iñaki está a punto de encadenar en el segundo de sus pegues pero tendrá que esperar para otra ocasión.

Satisfechos y con poca piel ya, ponemos rumbno a casa. Seguimos ;)